¡Déjame en paz!

¿Por qué cuando todo parece marchar bien vuelves para lanzarme a tu infierno? ¿Por qué tu sonrisa hipócrita no deja de atormentar mi presente? A veces quisiera poder arrancar esos labios asquerosos que no dejan de derramar mentiras de primera calidad, también quisiera arrancarte esos ojos que no conducen nada más que al abismo mismo. Eres como el acosador que yo nunca quise ¿Y quién demonios quiere uno? Sólo las locas enfermas que están infectadas con las novelas actuales, en donde les dicen que es más excitante. ¡BASURA! Yo no quiero tener nada que ver contigo, ya no quiero saber más tu nombre. Déjame en paz, por favor, ya no aguanto más tener que ver el rostro de las personas que me insisten a volver contigo. Son inocentes que sólo se creen las palabras de un mentiroso enfermo, de un idiota que no sabe más que usar las palabras para enamorar a estúpidas ignorantes, así como fui yo una vez. Dime, ¿Qué condenado descaro el tuyo es decir que a quien quier...