El poeta y la luna

Nota: Este pequeño cuento no había sido posible crearlo gracias a una conversación con una persona especial en mi vida. Me hizo ver que hasta el hombre más frío tiene motivos para amar, y que la mujer más indiferente tiene motivos para escuchar y sentir. Iniciar esta pequeña historia con un "Había una vez" no es apropiado, ya que siempre hubo una luz en la noche que nos iluminó a todos, y palabras que lograron enamorarnos perdidamente en sentimientos ajenos. Empezar con una frase no es lo apropiado, pero si lo es empezar a decir que los suspiros son los que pueden guiar a corazones sinceros. Y en este mundo lleno de palabras falsas, son los corazones sinceros los que mueren día a día gracias a heridas que ya no tienen cómo sanar, y recuerdos que ya no tienen cómo desaparecer. Y para los poetas, era una maldición el poder inmortalizar con tinta lo que no pueden expresar por sus labios de manera espontánea. De ellos siempre hemos leído poemas...