Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2015

Después de una pastorela

Imagen
   Me estaba muriendo de frío, o al menos eso era lo que mi cuerpo me hacía saber cuándo veía que mis manos se movían mecánicamente sobre mis brazos tratando de hacerme sentir un poco de calor.    Estábamos a las afueras del teatro, en donde la noche ya bañaba el centro de la ciudad, el frío se hacía presente en cada pequeña ráfaga de viento y las personas que estaban saliendo se amontonaban en las orillas de la acera para poder tomar un taxi de regreso a casa.   Para empeorar mi situación, nos paramos justo en medio de la entrada del teatro y la gran fuente universitaria que estaba encendida en esos momentos. Así que cada ráfaga de aire que corría venía acompañada de algunas gotas de agua que lograban mojar mi espalda y mi vestido.    Manuel y yo estábamos esperando a que saliera el actor que debía acompañarnos a la fiesta, ni siquiera me había molestado en preguntar de quién se trataba, pero ahí estábamos los dos, mirando hacia la entrada principal del teatro. La gente salía en

Sucedió

Imagen
De gris y blanco se vestían los días Alegando a la monotonía Ocultando todo aquello que sentía.  Las risas entre los amigos eran rutina Y los ojos seductores un fastidio. Recuerdo aún esos sábado y domingos, rechazando salidas y encuentros. Recuerdo tener el corazón roto  y la mente sin expectativas del futuro que veía acabar pronto por simples tragedias subjetivas.  Había perdido esperanza de seguir, de acabar una historia feliz y de encontrar razones para sonreír, aún con mil heridas y una cicatriz. La noche era mi consuelo,  el frío un simple anhelo en los momentos de tormento.  Me gustaba pensar para herir,  para hacer sangrar mi sentir, y aunque adore tanto mi sufrir estaba consiente de que el tiempo ya no lo iba a permitir.  Me enojaba tanto estar rodeada de extraños, de personas con ojos vendados, de risas vacías y tatuadas por historias de los olvidados.  Me enojaba llorar tanto en las noches. Mis lágrimas a

Él es

Imagen
Entre paredes blancas escribo Mitigando las ganas de salir E ignorando mis ganas de reír.  Quiero que él esté aquí.  Soy como una niña en primavera, Anhelando la hora de llegada De aquel que viene de tan lejos A darle esos besos prometidos A una criatura de dulces anhelos.  Imagino casi todo el tiempo Su reacción ante mis nuevas travesuras. Recuerdo sus diferentes sonrisas Y también pienso en sus locuras.  Para mí, él es sol, Es la dulce intención de querer ser mejor. Es como el río que no muere Y la brisa que sorprende Al bien aventurado  En las islas del perdón.  Él es el abrigo de mi invierno Y la lluvia en Marzo.  Es tantas cosas bonitas del año Así como es el constante recuerdo De las cosas que no tengo.  Sin embargo no decaigo Porque está conmigo.  Aún si no está presente Lo puedo sentir a mi lado.  Espero poder ser lo mismo por él, Poder ayudar cuando lo necesita. Ser quizá la luna de sus noches Y el rocí

Antes...

Imagen
  Si te hubiera conocido antes, estoy segura de que te amaría desde nuestro primer beso y también te hubiera dedicado poemas después de nuestro primer aniversario. Bajaría la cabeza por cada vez que me hubieras dicho "te quiero" y apuesto a que sonreiría como una tonta con nuestro primer "te amo". Te hubiera entregado todo de mí sin titubear, haría todo lo que una mujer puede hacer y más para ver a su pareja tan feliz como lo es ella.     Pero es demasiado tarde.    No sabes cuántos hombres han estado en tu lugar, abrazando y besando a esta mujer ya sin expectativas del amor. Me quedé sin dedos para poder explicarte con más detalle sobre la cantidad de hombres que me han decepcionado y que han dejado caer a este corazón ya amargo. Creo que si llegaras a extender tus manos y te arriesgaras a sostenerlo, te darías cuenta que lo he llenado de cintas y parches de plástico que posiblemente sean la razón por la cual es difícil enterarse de lo que siento.    Por