Fantasmas

Nota: Este fragmento de momentos fue hecho en una tarde solitaria, mirando hacia el atardecer que brindaba el malecón de la ciudad y también observando a las personas que rondaban por el lugar. Estos son quizá sus pensamientos.

Momento a solas

Uno no sabe si las cosas estarán bien cuando sonríes, eso es sólo una flor que decora el pastel, el verdadero sentimiento se encuentra entre los dientes.

No eres el amor de mi vida

No eres aquel que me hizo suspirar la primera vez por las noches, no eres aquel que aparecía en mis sueños para darme un beso. No eres NADA DE ESO.

Quisiera decir que fuiste aquel con quien imaginé ir al altar, pero no fue así. 

Perdí las ganas de hacer cartas de amor gracias a ése que llegó primero y me rompió el corazón. Tengo miedo de agarrar la tinta y el papel antes de tiempo. 

No eres el amor de mi vida, pero puedo decir que eres al que amo y adoro ahora. Eres mi presente y te vivo día a día. 

Eres mis sonrisas de la mañanas, mis besos apasionados que matan mi serenidad. Eres mi pensamiento principal. 

Quizá no fuiste el primero pero espero poder decir más adelante que fuiste el último. 

No sé qué hacer

Hay tantas personas a mi alrededor pero no las siento pasar. Me miran, juzgando a primera vista al extraño que rasca el piso sin razón, el que talla su cabeza de momento a momento. 

Pero no es lo que yo pienso. 

Yo soy alguien que quiere detener el tiempo. 

Pongo mis manos entrelazadas, detrás de mis rodillas y suspiro. 

Recuerdo que vine aquí para pensar, pero no logro hacerlo, también recuerdo que tenía tu amor pero ya no lo siento. 

¿Quién eres?

Sé que me sigues pero no quiero que lo hagas. 

Suena otra vez mi celular y tengo que contestar. 

Tú me rodeas y miras con curiosidad cómo mis labios se mueven, te da ganas de llenarme de besos. Te ignoro al ver otro mensaje y sonrío. 

Sé que te da envidia, te gustaría que te estuviera sonriendo a ti, pero no es así. 

Créeme cuando te digo que hace un tiempo lo hice, fue cuando tú saliste de mi vientre, antes de que me pudieras decir "Mamá". 

Lo que cuesta

Mantengo mi mirada en el suelo, diviso sólo el camino por donde debo ir. Dos personas me rebasan sin mirar atrás. 

Yo me siento cansada, quisiera tener las mismas fuerzas, sin embargo aún debo trabajar en ello. 

Sigo adelante, tratando de concentrarme en otra cosa. 

Vuelve a pasar gente a mi lado, es una pareja, me miran y luego se van riendo. 

Sé que no es fácil, tengo demonios que se muestran en mi cintura y mis piernas, casi no puedo caminar gracias a ellos. Debo ignorarlos y seguir corriendo. 

Sé que no tengo condición, por eso estoy aquí. 

Acelero el paso. 

Chocolate

La gente no siempre quiere escucharte hablar, algunos sólo te miran por compromiso, otros asienten con la cabeza y luego se despiden. 

Un día, un señor me ahuyentó con el brusco movimiento de su mano, pensé que no le gustaban los dulces o que simplemente había tenido un mal día. 

Espero verlo nuevamente, por eso lo estoy buscando entre la gente. 

Sigo aquí, para hacer algo más que sólo ganar monedas. 

Me gusta hacer que la gente sonría, con chocolates o una conversación, soy de las que no se rinden por una mala educación. 

Termina

Sostengo tu mano pero no te acompaño, sé que dijiste que dejara todo a un lado pero todavía no sé si dejarte a ti también. 

Todo se derrumba pero aún hay algo que no me ha llevado a renunciar a ti: la mentira. 

La dulce mentira de que algún día estaré contigo compartiendo algo más que un simple beso. Quería que fueras mis buenos días y buenas noches en la cama, que fueras la última de mis lágrimas. 

Pero aquí estamos, tú gritándome y preguntando por mis acciones, mientras sostengo tu mano.