Eón - El despertar del ojo del dragón

¡Lunáticos! Ya sé que ya llevo algo de tiempo que no les escribo a sus corazones rotos, pero no se preocupen, pronto lo haré. 

Hoy me presento con algo diferente. Dejando a un lado (sólo por unos días) todas las malas aventuras, el desamor y la decepción, que son los que gobiernan cada uno de mis escritos, les comparto mi pequeña crítica acerca del libro "Eón- El despertar del ojo del dragón". 

Para que ustedes también indaguen en nuevos conceptos. 

Hemos lanzado muchas piedras hacia la literatura contemporánea (me incluyo porque  no me gusta el comportamiento inmaduro de algunos fanáticos), criticando los clichés y en el absurdo mundo en el que las autoras no salen (digo "autoras" porque esto predomina mucho en ellas); como la típica protagonista "humilde" y bonita (que no cree que lo es, y debemos soportar sus inseguridades a lo largo de toda la historia) atrapada en la controversia de que es algo importante y tiene que detener un caos o a alguien porque lamentablemente todos dependen de ella en algún momento. ¡Ah Y no olvidemos el triángulo amoroso. 

Si quieren probar algo diferente a todo lo que acabo de mencionar anteriormente, entonces puedo decirles que "Eón" es para ustedes.  

¿Por qué? Eón, o mejor dicho "Eona" es una chica atrapada en una ciudad  en donde el machismo gobierna cada esquina. Las mujeres no son muy valoradas y también pasan a ser sólo objeto del hombre, podemos encontrar el mismo ejemplo en la historia de Mulan. Y lo que más llama la atención, las mujeres no pueden aspirar a ser Ojos de Dragón, ya que, y cito: 

"Las mujeres no tienen cabida en el mundo de la magia del dragón. Se dice que la mujer corrompe el arte y que carece tanto de la fuerza física como de la profundidad de carácter necesarias para unirse a un dragón de energía. Se cree también que el ojo femenino, demasiado acostumbrado a mirarse a sí mismo, no ve la verdad del mundo de la energía."  Prólogo, Eón. 

¿Y qué son los Ojos de Dragón? Son hombres capaces de controlar a los doce dragones de la energía, dichos dragones están inspirados en el calendario chino. Ya se imaginaran, existe el Dragón Tigre, Dragón Rata, Dragón Conejo... etc. Como dije, se supone que sólo los hombres macho pecho peludo espalda plateada y barba de vikingo, podían controlarlos, sin embargo  hay una razón por la que Eona quiere arriesgar su cuello para vestirse de hombre y entrar en la selección: ella puede ver a todos los dragones. Se supone que un Ojo de Dragón sólo puede ver a su dragón, sólo el suyo, y estamos hablando de aquel que lo controla; ya se darán cuenta a dónde quiero llegar: una mujer que ve a todos los dragones y no es nadie importante... Raro ¿No?

Me fascina que la escritora, Alison Goodman, no haya tenido piedad en ponérsela difícil a la protagonista.  Eona es coja, por eso mismo también es tratada (tratado) como un adefesio, su maestro de armas no es muy piadoso a la hora de entrenar y cada que pasa por las calles, las personas hacen cierto gesto para librarse de la mala suerte. No olvidemos el enorme peso de la gran mentira que la puede llevar a la muerte, Ella nunca fue normal, era una esclava y fue vendida a un antiguo Ojo de Dragón, el mismo que la entrena y la provee de recursos para participar en la selección. 

Ahora apodemos quitar el cliché de la forma de ser de una protagonista hoy en día, ella entrenó y tuvo que quitar obstáculos pesados desde que era pequeña. 

Gracias a la manera de escribir de la autora, podemos empaparnos del mismo sudor del sufrimiento de los personajes. Tanta es la simpleza y la armonía con la que las palabras te atrapan que llegas al punto de oler todo lo que se encuentra en el ambiente del personaje.   A mí me sucedió en un capítulo en donde se describe al antagonista, el Ojo de Dragón Rata; si se lo preguntan, no, no huele a alcantarilla, este personaje se identifica por el olor a naranja.

 

Ahora hablemos un poco sobre el nudo de la historia. Como esta crítica también está hecha para invitarlos a leer la historia, voy a omitir algunos detalles para que ustedes los descubran en el libro. Yo también odio los spoilers.
 Cuando se sabe al fin por qué Eón puede ver a los demás dragones, en esos capítulos vemos cómo muchas responsabilidades son clavadas en sus hombros. Estuve tan frustrada, creo que era más mi impotencia de no poder saber, al igual que la protagonista, sobre cómo resolver toda esa maraña de problemas. Nunca se van a aburrir en el libro, menos con los personajes que llegan a darle ese toque especial a la historia, Tenemos el ejemplo de la "contraria", un hombre vestido de mujer, públicamente aceptada por el emperador como consejera, los hombres sombra (hombres que hicieron el sacrificio de extirparse sus genitales), Ojos de Dragón en debate... No considero que en el libro haya personajes "no importantes".
La cultura china, ese es un punto que es una obligación para mí tocar, obviamente porque forma parte del ambiente de la historia. Algunos autores llegan a usar sólo una pincelada de una cultura para condimentar un libro, sin embargo en "Eón" se encuentran muchos simbolismos y normas rígidas de la propia China. Así que para aquellos que estaban un poco perdidos en cuanto al tema, podrían darse una idea a través de las vivencias de la misma Eona. Ojo, la misma escritora dice al final que el mundo de "Eón" es una fantasía, no se apega a la realidad.
El desenlace que no es tan desenlace...La autora da cabida a una segunda parte, se entiende que así sea porque todos los problemas que se presentaron en el nudo no se resolvieron del todo y el final abrió la puerta a algo más grande. Sin embargo, he de expresar mi disgusto a cierta acción del antagonista y de la decisión de la escritora al querer darle un castigo a este personaje.
Después de presentar una obra "cruda", con problemáticas que muy pocos autores llegan a poner sin rayar en lo mórbido, nuestro antagonista es "curado a medias de su maldad" de manera espiritual. Es como  si un capítulo de Game Of Thrones terminara con un "se casaron y fueron felices". Yo sé que eso no se queda así, también he leído el segundo libro, sin embargo me sigue haciendo ruido que este cambio de atmósfera tan ingenuo llegue de manera abrupta cuando nuestra protagonista ya tiene el poder para detener al antagonista.

No obstante, a pesar de eso, "Eón" es sin duda mi libro favorito. Desde la primera vez que lo leí, me atrapó y logró cambiar en mí una perspectiva oculta. Me hizo sentir fuerte y capaz de hacer lo que se me pusiera en frente, y, por todo lo que consideramos divino, amo mucho a todos los personajes (incluyendo a los hijos de puta que se pasaron de %$&$), cada uno me enseñó tantas cosas sobre buenos motivos para seguir adelante.
No por nada ganó los "Aurealis Awards" del 2008, en la categoría de fantasía.
Eón llegó a mi vida cuando no tenía con quién hablar sobre mis problemas, y ahora vuelve a mí después de algunos meses que se alejó (lo que es prestar libros y cazar a aquellos que te los deben ^^').
Yo se los recomiendo mucho, y créanme cuando les digo que harán lo que sea para leer inmediatamente la segunda parte.

Se despide por ahora, J. Luna