El calendario (Poema)

Un calendario he hecho,

contando por nuestro encuentro.

Sin embargo, oculto ya está

por lo misógino que ha sido conmigo.

Por más vueltas que dé a la hoja,

el día que estuve esperado

se está borrando por el recuerdo

de  la muerte de nuestro anhelo. 

Un calendario introvertido

en telarañas se ha convertido

porque mis ojos ya no podían ver

aquello de lo que nunca pude prometer.

De alegría a carmín marqué nuestro día,

pero de olvido y tristeza 

borré lo que queda

para convertirlo a un día cualquiera.

¿Qué más puedo pedir

al papel y el reloj

que poco se llevan?

¿Qué más puedo pedir

al pasado y presente 

que no han estado consientes?

Las hojas se han convertido en un guión

que nosotros fuimos escribiendo,

así como tú te perdías en cada canción,

sólo para ocultar los días de dolor.

Y ahora el telón del espectáculo

no se ha abierto por obra del desconsuelo.

Y el espectador paciente

ya no se encuentra presente.

El calendario ya registró

lo que el corazón pudo dar

contando a las lágrimas 

y las risas que ahora se van.

Y yo, sentada me encuentro mirando

a que ya llegue Enero

sólo para poder borrar el recuerdo

de tus besos de soltero

y de tus caricias diciendo:
 "yo ya no te quiero".